Desde que firmara con el Liverpool, Fernando Torres siempre dijo que lo que más ilusión le hacía era jugar contra el Chelsea. Pues el azar del calendario le dió la posibilidad de hacerlo, precisamente, en su debut en Anfield, su presentación oficial ante The Kop.
Tras su debut en partido de Liga en Birmingham ante el Aston Vila, el Chelsea visitaba Anfield el pasado domingo en partido correspondiente a la tercera jornada de la Premier (segundo para los reds al haber tenido que jugar la previa de la Champions entre semana). Al cuarto de hora de partido, Steven Gerrard ve el desmarque de Torres y le pone un balón de esos que pocas veces vio en el Calderón. El madrileño se marcha por el carril del 10, llega al área, se frena ante la llegada de Ben Haim y vuelve a arrancar dejando al israelí sin opciones. En la esquina izquierda del área pequeña encara a Cech y con un tiro suave, le envía la pelota a su izquierda. El balón tocó el interior del poste y se introduce mansamente en la red.
Fernando se tira al suelo en el corner mientras alza los brazos al cielo de Liverpool y su rostro y su cuerpo denotan su increible felicidad. Su debut en Anfield, ante su rival preferido ... y su primer gol. Y un excelente gol.
Posteriormente, un inexistente penalty (el árbitro ha sido castigado, igualito que en España) propició el empate del Chelsea. La felicidad (casi) nunca puede ser completa.
jueves, 23 de agosto de 2007
Un atlético en Liverpool (IV): El primer gol oficial
Publicado por Vicente Soto L a las 12:54
Etiquetas: Fernando Torres, Liverpool, Un atlético en Liverpool
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario