miércoles, 4 de julio de 2007

Ya lo han conseguido

Fernando Torres se va. Ayer se hizo público el acuerdo entre el Liverpool y el Atlético de Madrid para el traspaso de Fernando. Esta directiva nos vende al único motivo que teníamos los aficionados de sentirnos orgullosos de ser rojiblancos, al único motivo por el cual merecía la pena tragarse tostón tras tostón en el Calderón, al único jugador que, en las duras y en las maduras (¿ha habido alguna?), se ha atrevido a proclamar a los cuatro vientos su amor a estos colores y su orgullo por sentirse rojiblanco.

Y se va por la nefasta gestión de esta directiva. Por un lado, le ha vendido. Y no solo es que le haya vendido, es que, antes de venderle al Liverpool, le ha ofrecido a más de un club (y se de lo que hablo). Por otro, ha sido incapaz de crear un equipo a su altura en siete años: dos Intertotos es todo su balance. Y que nadie me hable de que es un equipo de viene de Segunda: el Sevilla vino de segunda sólo un año antes y miren en donde está. (Y ya que hablo del Sevilla, me hacen mucha gracia aquellos que dicen que es buena la venta de Torres porque ese dinero se podrá utilizar para mejorar el equipo, tal y como hizo el Sevilla tras las ventas de Reyes, Baptista y Ramos. Como he dicho tantas veces, el problema no es el dinero, son las manos que lo gestionan.)

Al jugador, no tengo una sola crítica que hacerle: es evidente que debe ser el quien de el visto bueno a la operación pero creo que bastante ha aguantado ya. Pero toda paciencia tiene un límite y parece ser que la suya se colmó el 20 de mayo de 2.007, tras el humillante 0 -6 encajado ante el Barcelona y aquella maldita jugada. Otro "mérito" más de esta directiva.

El año que viene iremos al Calderón y no tendremos referencia a la cual buscar, nos hemos quedado huérfanos, nos han dejado huérfanos. Sólo me queda el consuelo de que, allá donde vaya, Fernando será siempre "uno de los nuestros".

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Mis disculpas, pero no se puede estar llorando por la marcha de Torres al Liverpool.

Sin duda alguna se va un buen futbolista, una isla única en un mar farragoso. Pero el Atleti es o era otra cosa. Era un grupo homogéneo que encandilaba a la afición porque las individualidades se sumaban y hacían grande al club rojiblanco. De esto hace ya muchísimos años.

Un día llegó el "emperador" Gil y arrasó con todo. Utilizó al querido Atleti para su beneficio. Animaba a la masa despotricando a los merengues, eso si que vendía...la perdición. La masa se preocupaba más de las derrotas blancas y de los favoritismos arbitrales que de la carcoma que se había instalado en su propia casa.
No lo comprendo, como tampoco lo comprendieron los buenos aficionados atléticos que pudiera suceder esto. Había que haberle dado la espalda al "emperador" en su momento, porque de qué le vale a un club tener la mejor afición del mundo si resulta que los que meten los goles no lo hacen y quienes lo dirige están pensando en negocios de mucho calado monetario, que no tiene que ver con el deporte.

Los resultados deportivos ya los conocemos, ahí están. Y esto si que importa.

Que la marcha de Torres sea el punto de inflexión para hacer borrón y cuenta nueva en todo, pero eso está en vuestras rojiblancas manos...

Ánimo.

Anónimo dijo...

Una pena la marcha de Torres efectivamente.

Besos!

Anónimo dijo...

Por cierto recomiendo como tú, el link que pones sobre lo del 20 de Mayo, Iñako Díaz-Guerra hace un mini-artículo interesnante y describe la "jugada" de manera magistral.

Un beso.

Anónimo dijo...

Encima, Cerezo ha dicho que el 80% del traspaso es para pagar una deuda del club con Hacienda. Increíble, pero cierto.