Es hora de pedir disculpas

Ahora, que estamos en vísperas de Semana Santa, es hora de que el editor de este blog pida disculpas: disculpas a sus lectores y disculpas a su propio blog.

Los últimos diez días han sido infernales, demasiado trabajo y muy poco tiempo para poder escribir algo con un cierto sentido porque tampoco es cuestión de escribir por escribir. Decía alguien un día que, cuando uno empieza con un blog trata de escribir bien para sí mismo pero que, cuando se da cuenta de que eso que escriba, lo lee una cierta cantidad de gente al
día, se ve obligado a escribir cada día mejor porque sabes que hay alguien ahí detrás esperando leer algo con una cierta calidad y un cierto sentido.

Y eso, muchas veces, se convierte en una carga demasiado pesada. Y estos blogs deben ser una ilusión, nunca una carga. Por ello, a lo largo de este año y pico que llevo en la blogosfera, he visto ya abandonar a varios bloggers, futboleros y no futboleros.

Se me han quedado, estas días, varias cosas en el tinetero: básicamente, la Selección Nacional, el equipos de todos, pero también las declaraciones de Aguirre y Maniche, la continuidad (o no) del Vasco en el Atleti y algunas otras.

Pero volveremos: mi pico de trabajo ya ha pasado (eso espero) y muy pronto estaremos aquí, de nuevo, dando guerra.

Y, por cierto, tal vez, con alguna sorpresa.