9, 19 y, tal vez, 23 de mayo: esas son las fechas del posible triple enfrentamiento entre Manchester y Chelsea en busca de la triple corona: Liga inglesa, Copa inglesa y Champions.
Llevaba el Manchester muchos meses con seis puntos de ventaja en la Liga sobre los de Mourinho pero su derrota ante el Portsmouth y su empate ante el Boro en las últimas semanas, unida al empate del Chelsea en Newcastle, han hecho que los londinenses estén a sólo tres puntos, teniendo por delante un enfrentamiento el 9 de mayo en Stamford Bridge.
Diez días mas tarde, el sábado 19, se enfrentarán nuevamente en el partido del año por excelencia en Inglaterra, la final de Copa, un partido de larga tradición y que ningún aficionado al fútbol debería dejar de ver, al menos una vez en la vida. (Que quede claro que yo aún lo tengo pendiente).
Y puede que, si superan sus respectivas semifinales ante Milán y Liverpool, ambos se enfrenten nuevamente en Atenas el 23 de mayo para decidir quién sucede al Barcelona como campeón de la Champions.
El caso es que ambos han llegado a la fase final de todas las competiciones con sus opciones intactas pero, desde mi punto de vista, de forma bastante diferente.
El Manchester, después de muchos años de tratar de reconstruir el equipo y, sobre todo, el centro del campo, tras la marcha de Roy Keane, ha dado por fin con la tecla adecuada con la pareja Carrick – Scholes. Esto, unido a la explosión de Cristiano Ronaldo y la seguridad en defensa de Vidic, han vuelto a hacer de esto equipo un conjunto temible porque el resto de los actores principales son, básicamente, los mismos.
El Chelsea, por su parte, ha cambiado un esquema que venía funcionando (muy similar al que emplea el Barcelona) para “hacer hueco” a Ballack y Shevchenko. Dejando a un lado el hecho de que nunca entenderé la manía de algunos entrenadores y/o presidentes de cambiar lo que funciona y no cambiar lo que no funciona, el Chelsea de este año se ha demostrado como un equipo mucho menos seguro, mucho menos brillante (si cabe), mucho menos solvente y mucho más dubitativo que el de temporadas pasadas.
Pero la experiencia de este año demuestra que, en el fútbol, por diferentes caminos puede llegarse al mismo sitio. Veremos quien triunfa finalmente.
miércoles, 25 de abril de 2007
El ¿triple? enfrentamiento entre Chelsea y Manchester
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4 comentarios:
Pueden ser tres enfretamientos y a ver cual es más importante.
Actualmente yo veo mejor equipo al Manchester, más compensado, con más ilusión y con mucha más modestia que el Chelsea.
Liga y copa inglesa seguro para los "diablos rojos", champions no lo se... pero mis dudas están en que pasen la semifinal o no, no que venzan al Chelsea en la final...
Un beso y buen post!
El Chelsea a pesar de que pudo haber ganado por 3 o 4 goles de diferencia entre otras cosas por la floja defensa del Liverpool y sus continuos errores en defensa, pero de todas formas, el 1-0 es un buen resultado. El Chelsea juega igual de bien en casa que fuera, vamos, que no lo notan en absoluto, es más, diría que son mejores fuera de casa y sino que se lo pregunten al Valencia, además siempre suelen meter algún gol. Y con meter 1 el Liverpool debería meter 3, aunque con esa afición que tendrán a sus espaldas los 90 minutos y el equipo que tienen, pueden pasar, por supuesto.
Partidazo de Drogba y de Pepe Reina, junto con Joe Cole para mi los mejores del partido.
Me gustaría que ganase esta Champions el AC Milan, para que se acerque a las nueve de los arrogantes, prepotentes, chulos y aborregados madridistas. (Sus cinco primeras tenían tanto prestigio como el actual Trofeo Naranja)
¿Cree alguien que si el Real sólo tuviese dos o tres Champions, tendría la repercusión que tiene?
Ojalá que se echen otros treinta años sin ganar la Champions.
Por cierto los de Antena 3, son muy malos retransmitiendo fútbol. Son muy pretenciosos y no paran de echarse flores con su "Territorio Champions" . Repugnante. A ver si hacen cómo en Inglaterra en el Mundial, y ofrecen la posibilidad de ver el partido sólo con el sonido ambiente del estadio. Ganaríamos todos es salud.
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