miércoles, 5 de abril de 2006

Envidia sana

Veo con envidia, sana envidia, la hazaña de ayer del Villareal plantándose en semifinales de la Liga de Campeones tras eliminar a un Inter de Milán del que algún día hablaremos. Y siento envidia porque esto demuestra que no es necesario tener grandes presupuestos para hacer un equipo grande. Basta con hacer una buena gestión tanto económica como deportiva para estar en lo más alto. Salvando el caso del genio Riquelme, ¿es que acaso jugadores como Senna, Gonzalo,o Juanpi Sorín, por citar sólo algunos, han sido muy caros? Pues, obviamente, no. Basta con tener un buen director deportivo (José Manuel LLaneza, una de las claves de este éxito) que sepa de fútbol y que rastree los mercados. (Por cierto, oigo esta mañana en la Cope que tienen cerrado el fichaje de Robert Pires para el próximo año. Otro acierto).
Y este tremendo éxito pone nuevamente en evidencia a los directivos de este Atleti de mis desdichas. ¿O es que no lo ven, señores Gil y Cerezo? ¿O es que no les interesa verlo? Dejen ya de hablar de fantasmas, de descensos a segunda, de deudas históricas (cuando llevan ahí 20 años, la quinta parte de la historia del club), de que vivimos por encima de nuestras posibilidades y de todas esas milongas. No se si han dado cuenta que tenemos más abonados que habitantes tiene la ciudad de Villareal. Y ellos están donde deberíamos estar nosotros. Por algo será.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Supongo que ya lo habrás leído, pero Matallanas ha publicado en su blog una serie de preguntas bastante interesantes hacia Gil Marín, que se hace un seguidor atlético.

Parece ser, que los Gil, no son precisamente muy queridos por la masa social del Atleti.

Vicente Soto L dijo...

Ciertamente, Fer, no son muy queridos pero lo que tiene que hacer Matallanas, como periodista y como atlético, es coger a Gil Marín y formularle todas esas preguntas

Iván dijo...

Tristan, bien sabes que el problema de los malos fichajes de los gil no se deben a su inoperancia, son más bien fruto de acciones muy premeditadas. Es más rentable para sus bolsillos fichar mal y caro que bien y barato, como paga el atleti...